viernes, 28 de diciembre de 2012

Una Aventura Extraordinaria




Las mejores películas son aquellas que logran que el espectador experimente sensaciones que solo el arte puede lograr. Es por eso que el cine que trasciende en el tiempo es aquel que logra estimular, a través de las imágenes en movimiento, los pensamientos y los sentimientos.

Una Aventura Extraordinaria o en su título original Life of Pi (2012), que traducido significa La Vida de Pi, es una de esas películas que no se olvidan fácilmente; no solo por el trasfondo increíble de su historia sino por el espectáculo visual que se ha experimentado.

Pi es un joven indio cuya familia trabaja en un zoológico. Los problemas económicos hacen que Pi deba viajar al occidente para buscar un mejor porvenir, sin embargo la desventura hace que el barco naufrague, siendo Pi uno de los pocos sobrevivientes junto a otros animales entre ellos un tigre. Desde ese momento la cinta narra una historia de supervivencia tan alucinante como alucinada, llena de momentos emocionantes e inspiradores.

Life of Pi está dirigida por Ang Lee, que puede ser uno de los pocos directores actuales a quien sí se le puede considerar un genio. Lee es un maestro en contar historias humanas, muchos de los dramas que ha dirigido son películas casi perfectas y que van desde los dramas familiares como The Ice Storm (1997) a la historia de amor más controversial de la última década como lo fue Brokeback Mountain (2005), pasando por adaptaciones literarias como Sense and Sensibility (1996) y la genial y poco recordada Lust, Caution (2007) que quizás sea una de las mejores obras de la historia del cine romántico-erótico. Pero el Taiwanés Lee es también un maestro de la imagen, en el año 2000 revolucionó el cine de acción y de artes marciales con la impresionante Crouching Tiger, Hidden Dragon (2000), que en el Perú se vio como El Tigre y el Dragon, sin lugar a duda una obra maestra.

En Life of Pi, el director Lee mezcla la narración dramática con el espectáculo visual. Para eso crea imágenes digitalizadas de manera impresionante, acompañadas de una música con influencias hindúes y la actuación de actores poco conocidos. Si el año pasado The Tree of Life (2011) de Terrence Malick fue la experiencia religiosa en el cine, este año ese sitio lo ocupa esta película. Desde un inicio sabemos que estamos ante un relato espiritual, que provoca crear dudas sobre la fe y que opone al hombre frente a una naturaleza que le es esquiva y a la vez cotidiana.

Ambas películas tienen en común que al final logran con su objetivo, es decir que han dejado una huella en el espectador que no es fácil de olvidar. Como dice una crítica gringa, no es una película para ver sino una película para vivir.

Estoy seguro que Life of Pi arrasará en las categorías técnicas de los Oscar que se vienen, además de una segura nominación a Mejor Película. Una recomendación es que hay que ver la cinta en 3D, para poder apreciar en toda su magnitud la calidad de las imágenes. Una Aventura Extraordinaria es de las primeras películas que tenemos en cartelera que veremos en la próxima temporada de premios así que hay que disfrutarla. Totalmente recomendable.